Desconfía del RACE

A lo largo de esta primera parte del libro he sido muy crítico con el RACE. Nada de personal hay en estas críticas. Todas han sido explicadas y justificadas, y espero que así haya sido percibido por el lector. Ojalá pueda pronto publicar una nueva edición del libro en la que haga referencia a estas críticas en pasado y pueda cambiar el título de este capítulo, porque significaría que esta organización habría reaccionado corrigiendo contradicciones y recomendando a la sociedad sillitas que de verdad protegen a los menores de cuatro años. Dudo que esto vaya a ocurrir a corto, medio ni largo plazo, sinceramente, después de la reacción del RACE a las críticas del movimiento a contramarcha en general y al blog Laboratorio de Mamá^[1] no creo que ocurra nunca, y por eso es importante desenmascarar a esta organización para que desconfíen de ella los padres que quieran información fiable sobre sistemas de retención seguros para sus hijos.

El RACE es un club de conductores que vende productos y servicios a sus socios. En la actualidad desconozco si venden sillitas infantiles, o si disponen de una tienda online sólo accesible a socios, pero es un hecho demostrable que RACE y la marca de sillas Cybex han tenido un acuerdo de colaboración^[2] y que hasta 2013 RACE vendía en su página web sillas Cybex^[3] que casualmente recibían una valoración satisfactoria en sus rankings. Nada habría que objetar a este hecho, puesto que como club de conductores sería lógico que el RACE tuviera un acuerdo con una marca de sillas de la más alta calidad que ofrecieran máxima seguridad para facilitar a sus socios la compra de las mismas. Pero lo que no es lógico, sino contradictorio en grado sumo, es que las sillas Cybex con valoración satisfactoria en los rankings de RACE son a favor de la marcha cuando según sus propios informes es más seguro que los niños viajen a contramarcha.

La contradicción sigue aumentando cuando sillas a contramarcha son valoradas en sus rankings por debajo de otras a favor de la marcha entre las que se encuentran las de Cybex, y concretamente la Cybex Pallas con escudo, un sistema peligroso en el que viajaban niños que quedaron tetrapléjicos y murieron y que ha sido prohibido en países como Canadá y Australia y descatalogado en EEUU. En estos mismos rankings se crea un vacío informativo sobre sillas a contramarcha con Plus Test, el test más exigente en seguridad, ya que ni siquiera aparecen en sus rankings y análisis^[4]. Son las usadas en los países nórdicos, donde la tasa de fallecimientos infantiles en accidentes de tráfico es la más baja del mundo. Otras sillas a contramarcha de origen nórdico pero sin Plus Test^[5], sí son analizadas y reciben en los rankings de RACE la calificación de insatisfactorio. Su protección se define de calidad inferior^[6] sin ningún dato que sustente esa inferioridad. Protegen más, pero son peor puntuadas que sillitas a favor de la marcha por su peso, por los materiales o por la facilidad de instalación. Y es lo que considero la perversión que entrañan los rankings del RACE: la seguridad sólo supone un 40% de la valoración de las sillitas.

El porcentaje que se otorga a la seguridad en impacto frontal de la silla en la nota final es sólo del 20%. A la seguridad en impacto lateral otro 20%. El 60% restante se reparte entre el diseño de la silla, el manejo y la ergonomía y dará mucho juego para conseguir los resultados y las posiciones en los rankings que ellos deseen. RACE especifica cómo valoran las sillas en los detalles de sus informes. El problema es que los padres consultamos los rankings sin leer todo el informe y asumimos erróneamente que las sillas mejor valoradas en los rankings son las más seguras para nuestros hijos. Es nuestra responsabilidad como padres usar el ranking teniendo claros los parámetros en que se basa el mismo, a pesar de que RACE nos induce al error en el título de su informe. Al buscar en Google por su informe, lo encontramos con el siguiente título: “Sillas de coche para niños; comparativa de las más seguras | RACE”, y con la siguiente descripción: “Cuáles son las sillas de coche para niños más seguras. Si quieres saberlo, no te pierdas el estudio del RACE. Analizamos los principales modelos del mercado”. Venden la seguridad como parámetro único y principal de su informe, lo cual es falso y puede verificarse en el propio informe.

RACE es un referente ilegítimo de seguridad vial en nuestro país, y los padres confían en sus valoraciones para elegir un dispositivo de retención infantil para sus hijos. Es un club privado, que puede tener acuerdos legítimos con diferentes marcas. Lo he escrito varias veces a lo largo del libro, insisto: creo que es necesario que RACE sea derribado del pedestal de referente en seguridad. Si necesitas más argumentos para derribarlo te recuerdo cómo RACE favorece la clasificación de sillitas con escudo, un sistema peligroso prohibido y descatalogado en otros países, sólo bajando un poco la valoración de estos dispositivos por generar presión abdominal por encima de los límites tolerables; cómo genera un silencio informativo sobre el Plus Test o cómo puntúa de forma negativa sillitas a contramarcha no por su seguridad sino por lo que ellos consideran una colocación compleja. Por favor, no te bases en la información del RACE si estás buscando la silla más segura para tus hijos.